Los problemas con las últimas actualizaciones del Lockheed Martin (LM) F-35 Lightning II harán que el fabricante de aeronaves no cumpla con su objetivo de entrega para 2023 de hasta alrededor de 50 aviones, dijeron funcionarios de la compañía la semana pasada.
Los retrasos podrían reducir los ingresos de LM para 2023 en cientos de millones de dólares.
Lockheed planeó originalmente entregar entre 147 y 153 cazas este año. Pero los problemas de software con las actualizaciones conocidas como Technology Refresh 3 o TR-3 están causando retrasos significativos. El Pentágono anunció en junio que no aceptaría F-35 de nueva construcción con TR-3 hasta que las actualizaciones estuvieran completamente listas.
El CEO de Lockheed, Jim Taiclet, dijo en una conferencia telefónica con inversionistas que la compañía ahora espera entregar de 100 a 120 F-35 este año, dados los problemas de software TR-3.
Jay Malave, director financiero de Lockheed, dijo que los retrasos en las entregas le costarán a la compañía entre $210 millones y $350 millones este año, dependiendo de qué tan pronto la compañía pueda comenzar a entregar cazas con TR-3.
Sin embargo, la compañía no ha ralentizado la producción del F-35, agregó Malave, y almacenará los aviones terminados hasta que estén listos para su entrega.
“No habrá retraso en la producción”, explicó Malave. "Solo habrá un retraso en la entrega en función de la finalización de las pruebas de integración de software que deberían realizarse pronto".
El próximo año, agregó, es probable que LM termine entregando más de los 156 cazas que planeó construir y entregar en 2024.
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